"La des estructuración continúa y la obra se convierte en la simpleza que dan dos líneas verticales cruzadas por una horizontal... que el espectador en esta ocasión lo convierte en columpio y eso es casi fascinante ya que es un retorno al icono estático con potencialidad de movimiento... un elemento que sugiere el mundo infantil y por lo tanto hace que regresemos y recordemos, en este caso algo que nos suele gustar, el mundo de la infancia del que partimos y al que volvemos en la vejez y en la enfermedad (Alzehimer)..."
"El columpio nos lleva al círculo, que es a lo que un niño aspira cuando sube y se atreve a retar a la ley de la gravedad... ¿conseguiré dar la vuelta? Ese círculo que sugiere perfección y que en mi caso es siempre incompleto e imperfecto como todo lo anteriormente explicado pero no por ello malo ni decadente."
"El columpio nos lleva al círculo, que es a lo que un niño aspira cuando sube y se atreve a retar a la ley de la gravedad... ¿conseguiré dar la vuelta? Ese círculo que sugiere perfección y que en mi caso es siempre incompleto e imperfecto como todo lo anteriormente explicado pero no por ello malo ni decadente."